CAPÍTULO 4
PARTE 2: LA ISLA DE FALLARIEN, EL PARAÍSO ABANDONADO

ISLA FALLARIEN

Hace unos 700 años, no mucho después de que el Sagrado Reino de Noigllado fue establecido, una extraña plaga azotó el continente. Los que la sufrían perdían completamente la consciencia y la memoria, y se volvían una especia de muertos vivientes. El Rey no tuvo alternativa: ordenó a todos que cazaran a los que padecían la plaga, los pusieran en un gran barco y arrojaran el navío al Océano Cisne. De esta forma, los enfermos abandonarían el continente y ya nadie los recordaría. Así, el bote arribó en una isla sin nombre, muy lejos del continente. Los enfermos bajaron del bote y comenzaron a vagar por la isla, como zombis. Accidentalmente, uno de ellos entró al bosque y se cayó en un manantial. Cuando despertó, descubrió que había recuperado la consciencia. Sacó un poco de agua del manantial y la derramó sobre el cuerpo de todos; de esta forma, los enfermos finalmente fueron curados. Aún así, sus recuerdos no fueron recuperados. Sin saber nada del continente, de que fueron abandonados, de Ristaccia incluso, empezaron una nueva vida en esa isla. Se volvieron los primeros isleños. No mucho después, los isleños descubrieron que el agua del manantial tenía una especie de poder mágico; no sólo curaba enfermedades sino que brindaba muchos milagros. Podía hacer que nacieran flores sobre tierra infértil. Podía hacer las cosechas más provechosas cada año. Podía hacer más lista a la gente. Usaban el agua todos los días, y el manantial nunca se secaba.

Cientos de años pasaron. Con los milagros concedidos por el manantial, los isleños crearon una civilización centrada en él. Llamaron “Lourdes” al manantial y creían en él. Creían que había un Dios viviendo en el manantial de Lourdes y toda la felicidad en sus vidas era proporcionada por él. Siempre agradecían al dios por darles una vida feliz. También llamaron “Fallarien” a la isla, porque tiene el mismo significado que “paraíso”. Eventualmente, fue formada una religión.

Al mismo tiempo, la completamente formada Religión Ristaccia, controlaba el continente entero. No había una sola persona en el continente que no creyera en Ristaccia. 2 civilizaciones paralelas creciendo por separado, ignorando la existencia de la otra. Esta situación duró cerca de 700 años. Un día, otro milagro fue traído a los isleños: una joven virgen sin desposarse quedó encinta después de beber el agua del manantial, y un año después, justo después de dar a luz a su bebé, falleció. Los isleños creían que la bebé era la Hija de Lourdes y la respetaron como “la Santa Hija”. Fue criada en el monasterio, y recibía la atención de todos.
‘Hannes’ fue el nombre dado a la Santa Hija. Todos esperaban más milagros de su parte.